14 de junio de 2011

Alfonso, los libros y el sexo

2

- ¿Te enteraste que Alfonso salió con Jimena?
- ¿Salió al final?
- Sí. Le tuve que insistir un montón a ella. Tenía muy malas referencias, pero bueno, era sábado a la noche, no tenía mucho que hacer, los dos están un poco solos los fines de semana, no sé, esas cosas que ayudan.
- ¿Y cómo fue?
- Y… Jimena le pidió que vaya a la casa porque estaba resfriada y no quería salir.
- Muy buena onda.
- Sí, no sé, raro, yo la vi el viernes y estaba lo más bien. Pero bueno, la cosa es que Alfonso fue para la casa. Imaginate que no iban a tomar el té a las 12 de la noche de un sábado.
- Y, no.
- Bueno, igual lo tomaron porque Jimena decía que se sentía mal, que tenía tos. Pero la cosa iba bien al parecer. En la mesa del living había un libro de economía. Ese de Martín Lousteau que salió hace poco. Economía no sé cuanto, se llama.
- Sí, es divertido. Economía 3D.
- Bueno, estaba ahí. Alfonso lo vio… Viste que a Alfonso no le gustan mucho los best seller…

“¿Estás leyendo este libro? ¿No te das cuenta lo que es? Un engaño con todas las letras. Así de claro como te lo digo. Nos engañan con estos libros divertidos. José me había dicho que eras inteligente, no entiendo cómo no te das cuenta. Son libros para bobos, porque los tipos que los escriben saben que la economía es otra cosa. Nos muestran espejos de colores como a los indios y la guita se la hacen ganar a los grandes grupos concentrados. Todos estos tipos trabajaron para los bancos más grandes del mundo. ¿No te das cuenta que son unos hijos de puta?

A mí me perece divertido.

Es que es divertido. Como comer un copo de nieve. Pero están ocultando la verdad con estas estupideces. ¿Ahora no existe más la plusvalía, la explotación, los obreros que no tienen otra cosa que vender que su fuerza de trabajo? Pero te hablan del mercado del sexo oral, la economía del orgasmo y de los penales. Probabilidades bobas que te hipnotizan. Y mientras te venden los espejitos, países como Grecia o Irlanda quiebran por burbujas que estos grandes hijos de puta ocultan. Es como si Cavallo se pusiera una nariz roja de payaso y le hiciera chistes a los chicos. Pero Cavallo es feo y este tipo es jóven y exitoso.

¿No exagerás Alfonso?

NO. Estos libros dicen que el sujeto no actúa como sospechaba la economía clásica. Ese es el fundamento. Ok. Ese sujeto era racional y egoísta. Ok. Ahora dicen que es neurótico e idiota. Ok, pero lo que no te dicen estos hijos de puta es que es neurótico e idiota porque lo están engañando con estas boludeces que le muestran, ellos lo vuelven irracional y neurótico porque les conviene que no sepan cómo hacen para mover cifras astronómicas y quedársela ellos. Es una vergüenza.”

- ¿Cómo terminó la noche?
- Jimena se hartó y le dijo que tenía que rendir el lunes.
- ¿Jimena estudia todavía?
- No, se recibió hace 4 años.
- O sea que Alfonso sigue siendo virgen.
- Sí. ¿Se te ocurre alguna mina que sea medio rara y pueda llevarse bien con Alfonso?
- ¿Para una relación?
- Para una noche. Con eso creo que alcanza.

Alfonso, el cine y el sexo

1

- ¿Te enteraste la última de Alfonso?
- No, ¿qué pasó?
- Viste que salía con una chica. Bueno, alquilan una película y está todo preparado para que, ya sabés, pase lo que tenga que pasar. O sea, hacen que miran la película, o la miran un rato, empiezan los besos, las caricias y cuando se quieren acordar, están ahí en el sillón, y bueno, la cosa avanza y se olvidan por completo de la película. Lo obvio. Lo que siempre pasa. Alquilaron una medio vieja, de Johnny Deep porque a ella le gustaba. “Blow. Profesión de riesgo”. Bueno, Alfonso la quiso ver entera…

“¿No sé si vos te das cuenta lo que la película te quiere decir? Básicamente, que nosotros, los sudamericanos, porque lo dice bien claro desde la escena uno, que nosotros, los sudacas sólo podemos vender materias primas y vendérselas a ellos, los imperialistas, grande capos, héroes del mundo moderno. Sí, es una historia real y toda esa perorata, pero está clarísima la teoría de la dependencia acá. La droga es la materia prima. Quienes la compran y se llenan de plata son ellos. Todos los que tienen la cara medio morenada son sudamericanos, viciosos, traidores, lo peor de lo peor. Y ahí está la madre carmelita de Johnny Deep, el Americano promedio, el grandísimo hijo de puta que explota a todo el mundo y tiene cara de bueno y te compra por eso. El muy hijo de puta termina la película siendo algo así como un héroe y es un hijo de puta de cabo a rabo. Pero se arrepiente, tiene algo así como la necesidad de redimir. ¿A quién? A la hija. ¿Qué es la hija? América. La hija es América, o sea no América como continente, sino América que es Norteamérica, o sea ellos. Salvando a la hija, salva a todo el país.

Calmate Alfonso.

¿Cómo me voy a calmar? ¿La mujer de Johnny Deep quién es? Penélope Cruz que no sé cómo aceptó ese papel. Porque hace de la sudaca más sucia y asquerosa que puedas imaginar. Súper viciosa, sexópata a más no poder, es Latinoamérica en su máxima expresión. La hija es el botín. Por eso el bueno de Johnny la quiere salvar y hace todo ese camino del héroe por ella. Patético. Súper patético. ¡Vayan a enseñarle a otro estas estupideces! ¡A mí no! ¡A mí no!”

- Sí, la chica se fue un rato después. No quiso ni esperar el taxi en su casa.
- O sea que no pasó nada.
- No. Alfonso sigue siendo virgen. Y cumple 30 el mes que viene. ¿Tenés alguna otra chica para presentarle?